Al final me he animado.
Por lo tanto, aquí tenéis una conclusión para toda la saga. Y sin
spoilers.
Puede que no fuese el título más indicado para empezar esta etapa
del blog, pero quería cerrar ese capítulo de mi vida dado que
estrenaban la última película. Como habéis comprobado no me he
limitado a la saga principal, sino que he comentado un par de cosas
más que tenía a mano. Quizás en un futuro consiga Corpúsculo,
la novela que lo ridiculiza, o algo de información extra que
procedente de los diarios de la autora o de la guía oficial. Si
alguien está interesado en tener más cosas, buscad por internet. Ya
hay hasta un cómic de Crepúsculo traducido a todos los
idiomas en los que se vendió la saga, aunque prefiero los dibujos
que colaron en la versión japonesa de las novelas.
En cuanto a maquetación, aquí en España tanto Alfaguara como el
Círculo de Lectores tienen sus pros y sus contras. Por un lado
prefiero la dimensión ligeramente reducida y la portada mate del
Círculo de Lectores. Por otro lado he comprobado que en lo que se
refiere a decoración interna, aunque escasa, es mejor en Alfaguara.
Solamente hay que comprobar la diferencia con la que tratan las
cartas “manuscritas” de Edward y Jacob. Sé que más tarde
sacaron ediciones especiales y en tapa dura. No sé cómo habrán
variado a lo largo de estos años, pero en general prefiero
Alfaguara.
Dejando a un lado las ediciones y extras, quisiera recomendar esta
saga al público al que va dirigido principalmente -adolescentes y
románticas sin remedio- y a todos aquellos que les guste analizar la
psicología existente tras los personajes. Puede que sea una saga muy
específica, pero ha tenido un gran impacto social, en parte porque
ha dado pie a las sagas juveniles de temática romántica oscura. Sin
embargo, también ha ocasionado que haya un abuso de la figura del
vampiro para todo dejando atrás a esa criatura de terror que existía
hasta ahora.
Desde un punto de vista más o menos objetivo no es una novela
especialmente brillante. Existe demasiado azar en las situaciones que
se presentan y no hay apenas acción. Para algunos la salva el
romance, aunque, como vengo diciendo a lo largo de toda la saga, es
un amor enfermizo que no se debería de idealizar. El otro punto
bueno que tiene es que la lectura es bastante ligera y está muy bien
expresado, además de un trato de los personajes destacable. Sin
embargo, la idea principal no es demasiado original.
A pesar de todo, de alguna manera ha logrado colarse en el mundo del
cine. Después de una primera película desastrosa que logró
enganchar al público lograron hacer una saga bastante decente,
aunque no será precisamente por la elección del reparto. Y con
reparto me refiero a mi “queridísimo” Robert Pattinson -nótese
el sarcasmo- y a la sosa de Kristen Stewart. Bueno, antes de que me
echéis el mal de ojo recordaros que no soy especial fan de las
películas y de todas formas, ¿qué más os da lo que yo opine?
Pensad que así tenéis más Robert para vosotras.
En fin, para todo aquel que le quiera dar una oportunidad y no esté
muy convencido puedo decir que Crepúsculo no es un libro con
un final tan abierto que sientas la necesidad de leer el siguiente.
De hecho, se le podría tratar como tomo único. Prácticamente no
deja ideas sin concluir.
Por último, y esto ya de carácter personal, muchas gracias a todos
mis lectores silenciosos y a todos aquellos que han dejado sus
comentarios. Todos vosotros habéis hecho que Sol de Medianoche se
convierta en la entrada más visitada con casi 100 personas -voy a tener que llamar a Edward psicópata más a menudo- y en el
mes de noviembre obtuvo también récord de visitas en toda la
historia del blog. ¡Muchísimas gracias!
Nos vemos en las
siguientes novelas. ^^
P.D.: Si queréis ver las
otras entradas de la saga Crepúsculo, aquí dejo el link:
Well, alguien tenía que comentarlo...
ResponderEliminarPara empezar, me gusta tu entrada; me parece bastante crítica (en el sentido de objetiva, no de "odio la saga") y toca algunos temas curiosos y controvertidos. Por ejemplo, el momento en que destacas cómo el amor de Bella y Edward (que viene siendo la trama básica de las novelas) es enfermizo y más bien poco recomendable.
Jo, yo quería llevarte la contraria en algún punto, pero la verdad es que estoy de acuerdo en casi todo. Se trata de una saga de novelas más bien poco originales; hasta donde yo leí, además, había poca trama y poca acción, y todo se basaba en el típico tonteo de dos adolescentes de "estamos juntos... no estamos juntos..." Lo único que me parece digno de mención en esta saga son los personajes secundarios (hay algunos buenos), porque lo que viene siendo el planteamiento está más bien manido y, sinceramente, incluso la trama de los vampiros buenos y maravillosos y absolutamente perfectos ya se ha tocado más veces (y, desde mi punto de vista, se ha hecho mejor).
De los vampiros en general quería yo hablarte, también. De cómo nos los han ridiculizado desde mucho antes de Crepúsculo (y de cómo esta saga les ha dado el hachazo final y se los ha cargado del todo): no es que no me guste la idea del romance "oscuro", como lo has llamado, pero la verdad es que me da verdadera lástima que un monstruo mitológico como es el vampiro haya perdido toda su fuerza. Es decir, está bien que haya vampiros "buenos" (no tengo nada en contra del Pequeño Vampiro), pero la situación ya roza el ridículo, sobre todo porque ya existían libros y películas sobre esto, pero dirigidas a un público más específico y, sobre todo, menos edulcoradas.
Por último, y ya te dejo, que me extiendo, apoyo totalmente tu comentario: ver las películas duele físicamente. En serio. No tengo nada contra Robert: el personaje era bastante fastidioso y él no hace nada por mejorarlo, pero ya está. Es decir, no veo que actúe mucho peor que la media de gente "guapa" de Hollywood. Pero lo de Kristen es patético (y no precisamente en el sentido en que se usa para describir el arte). No he visto una cara más inexpresiva en la vida: entiendo que Bella no tenía muchas luces ni un espíritu entusiasta en las novelas (al menos hasta donde yo llegué, era una muchachilla más bien aburrida, sosa y sin ánimos de nada; lo que todavía no entiendo es cómo pudo causar tanto revuelo en el pueblo... Es decir, ¿es que no había otras mujeres por ahí? ¿Todos los tíos eran tan fáciles de impresionar? ¿Nadie se planteó que fuera una bruja y estuviera hechizándolos? La verdad es que yo sí), pero es que Kristen lo ha llevado al extremo. No sé si es culpa suya o no, pero con tres expresiones faciales no se pueden rodar veinte mil películas.
Y eso es todo.
(Also, como dije, buena entrada ;) )
Muchas gracias por dejar tu comentario/crítica. Me ha encantado, sobre todo el hecho de que le hayas dedicado tanto tiempo, y me alegro muchísimo de que haya sido lo suficientemente convincente u objetiva como para que no me puedas llevar la contraria.
EliminarAntes de nada debo aclararte que soy fan de la saga, de ahí que no haya sido todo una expresión de odio hacia las novelas de Stephenie Meyer. Sin embargo, a veces se me cruzan los cables y me da por analizarlo todo en los libros. Además, me los he leído tantas veces -el primero sobre todo- que he podido observar todos los entresijos de la historia.
Por cierto, a mí también me gustan bastante los personajes secundarios. De hecho, Alice es mi personaje favorito. ¡Es tan entrañable! La adoro.
En cuanto a la reacción de la que hablabas que tienen todos los chicos con Bella al llegar al pueblo, he de decir que a mí también me extrañó. En la primera novela la propia Bella achaca su éxito repentino a que no le han visto pasar por las fases menos agraciadas de su adolescencia, que es una explicación medianamente razonable. Sin embargo, me convenció más la razón que proporciona Edward en el primer capítulo de Sol de Medianoche: Bella es la novedad en un pueblo pequeño donde nunca pasa nada, por lo que a los chicos les parece distinta e inalcanzable, y esto la convierte en un reto.
También con tu mensaje me he acordado de cuando leí Crónicas Vampíricas (no las de Anne Rice, sino Vampire Diaries de L. J. Smith) al comenzar toda esta fiebre vampírica. Recuerdo que la trama es prácticamente la misma y Stephan me pareció un calco de Edward. Me enfadé por la poca originalidad de esta saga. Lo cierto es que no me acuerdo de mucho, así que no puedo especificar más, pero me dejó la misma sensación. Más tarde descubrí que me equivocaba. Lo único que tengo que decir al respecto es que la saga de Smith se comenzó a publicar en 1992 y que lamento mi error si ha ofendido a alguien.
En fin, solamente quería contestar algunas partes de tu mensaje y me ha quedado la respuesta un tanto deshilachada. Debe ser que no tengo un buen día.
Espero seguir viendo tus comentarios en próximas entradas y muchas gracias. ^^